Los hábitos, son generalmente conductas aprendidas las cuales se repiten a lo largo del tiempo, y son muy difíciles de cambiar.
José Palma Checa
Estas, se ven reforzadas por las conexiones neuronales que se establecen cada vez que seguimos haciendo algo, ya sea positivo o negativo.
Al contrario, cada vez que hacemos algo de manera diferente, se van deshaciendo conexiones antiguas, y aparecen nuevos comportamientos, que al igual que los anteriores, se vuelven a fortalecer cada vez que repetimos algo nuevo.
Cuando son hábitos que nos entorpecen en nuestra vida diaria, estas se vuelven menos soportables, por eso mi consejo es que, si necesitas ayuda, acudas a un especialista, en este caso puede ser a tu médico de cabecera a modo más genérico —si te ha de derivar a otro especialista, este lo hará—.
Pero también si te lo puedes permitir, hoy en día existen otros tipos de especialistas, que te pueden atender de manera eficaz y con rapidez, ya sea un nutricionista, un psicólogo o un coach —depende el problema a tratar—.
Y es que, los seres humanos muchas veces solemos tener hábitos perjudiciales, tales como fumar, usar la comida cuando tenemos ansiedad, o usar estupefacientes para dejar de lado los problemas de nuestra vida diaria.
Debemos de entender que, estos hábitos lo único que hacen es perjudicarnos y no dejan a nuestro cuerpo funcionar de un modo natural y óptimo —para lo que está preparado—, y es que, no deshacernos de estos hábitos, habitualmente puede causar problemas muy graves en nuestra salud.
Debemos de, gestionar los malos hábitos con herramientas que faciliten su ruptura, mediante un enfoque paso a paso, en el cual vayamos alejándonos de ese viejo hábito que nos domina y que no nos beneficia, para poco a poco pasar a otros hábitos que sí nos ayuden a mejorar nuestra calidad de vida.